Callaos Casandra!
De vez en cuando por no decir todos los días, es genial encontrarse con alguna película del genial Woody Allen. En esta ocasión me encontré con un film llamado Poderosa Afrodita (1995).
La historia se centra en un matrimonio neoyorkino que se plantea tener un niño, Lenny (Woody Allen) y Amanda (Helena Bonham Carter) se encuentran a cenar con amigos que esperan un bebe esta situación desencadena las ganas de ser madre de Amanda, una galerista de arte muy distinguida. Todo lo contrario a Lenny, un cronista de deportes que no esta muy convencido de ser padre. Amanda da por sentada su decisión y comienza los tramites de adopción aun no teniendo el visto bueno de su esposo.
A pesar de no estar preparado Lenny pronto se termina encariñando con el niño al que llaman Max, a medida que este va creciendo se dan cuenta que posee mucha inteligencia y este atributo lleva a Lenny a querer conocer a la verdadera madre de Max.
A lo Woody Allen, el film se embarca en situaciones muy graciosas que llevan a Lenny a dar con el paradero de la mujer. Resulta que la madre biológica de Max llamada Linda Orgasmo (Mía Sorvino) entre otros nombres estrafalarios es actriz porno, Lenny se asombra con esta situación y sin mas decide hacer que la vida de esta mujer buena pero ordinaria cambie para bien del niño y comienzan un vinculo desde la amistad que resulta muy interesante de ver por la química que generan ambos actores como Mía Sorvino y Allen que no tiene desperdicio. A todo esto el matrimonio de Lenny se hace añicos con la llegada de un hombre adinerado a la vida de Amanda quien la tienta para obtener su propia galería de arte.
Un sin fin de encuentros y desencuentros sumado a una tragedia griega con personajes mitológicos que narran la historia de manera exagerada generando en el espectador una sonrisa asegurada con un toque de distinción como nos tiene acostumbrados el genial y eterno Woody Allen. Imposible que no te den ganas de mirar Poderosa Afrodita mas de una vez, es una película brillante y sublime vale la pena toparse con este lujo.
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