La entrevista como nueva forma de arte

 Si el lector realizara el saludable ejercicio que consta solamente del consumo de entrevistas, podrá, de manera clara, agruparlas en dos grandes bloques concretos:

 1-En muchas ocasiones, el entrevistado se destaca por sobre la obra que tiene que difundir en dicha entrevista (llámese disco, libro, película, lo que sea) y queda, a los ojos o a los oídos de todos, como una obra en sí mismo y, esto es lo más destacable, suele suceder también, que al escuchar una entrevista realizada a alguien que no es santo de nuestra devoción hasta ese momento, a partir de ahí, logre cambiar (sin proponerselo, evidentemente) el cristal con el cual solíamos "juzgarlo" anteriormente. Resumiendo, un tipo que nos parecía un gil, termina cayéndonos genial y hasta, quién dice, nos termina gustando su laburo que antes nos parecía realmente repulsivo.

 2-La polémica no solo vive pegada a los programas donde se habla de fútbol (conventillo de conventillos) y/o de espectáculos, si no también a las entrevistas o programas que abordan temáticas artísticas, aquellas que, se sabe, suelen por momentos, poner de manifiesto nuestro costado más salvaje a la hora de defender una idea propia atacada por terceros ( o cuartos o quintos y aveces por sextos), a la hora de escuchar algo indignante, algo que toque o simplemente roze o destroce lo que para nosotros es un mínimo de decencia artística, en definitiva, cuando quieren hacer pasar por obra de arte algo que, a la vista, es un afano, por ende, al saber que nos mienten en la cara, se le salta al cuello al entrevistador, o se le tira el vasito de agua ( si el programa es de esos que tienen un mínimo de presupuesto para comprar agua (si, en algunos ni agua se le ofrece al entrevistado)) en la cara al que pregunta. Evidentemente, en este grupo, rápidamente nos aparecen incontables acontecimientos recordables, pero me refiero acá, específicamente a aquellos de los cuales se pueda sacar algo productivo, como veremos más adelante.

 (Seria una negligencia negar u omitir la existencia de un tercer grupo que, más precisamente, se desprende del segundo y es aquel en donde entrarían las entrevistas que plantean de ante mano el quilombo, inclusive hasta suelen guionarlo, esas en las cuales el bardo empieza como una jodita, algo light y, de repente, todo se va de las manos, los giles que tenían que hacer de cuenta que peleaban, que defendían posiciones, ideologías esteticas o eticas de la estetica, se dicen algo que por alguna extraña o desconocida razón para nosotros, toca su corazon y las piñas verbales comienzan a ser con las manos. Pero hoy, solo vamos a ocuparnos de los dos primeros grupos, entre otros razones, porque no recuerdo una entrevista que trate sobre algún tema de provecho artístico en la que se halla dado este tipo de suceso)

 Jim Morrison dijo algo genial en una entrevista que le realizo la revista Rolling Stone en 1969: "Creo que la entrevista es la nueva forma del arte. Creo que la auto-entrevista es la esencia de la creatividad. Te haces preguntas a ti mismo y tratas de encontrar respuestas.El escritor solo esta contestando una serie de preguntas no pronunciadas". En su idea, Morrison esta profundizando la idea estándar de entrevista entendida como alguien que le hace preguntas a otro y este ultimo si puede, las contesta, dándole paso a una concepcion de entrevista constante e inconsciente que estaríamos realizandonos a nosotros mismos a la hora de dar a luz nuevas canciones, nuevas películas, nuevos cuadros o poemas o lo que sea que cada uno entienda como arte. También, esta dando a entender a la duda como punto de partida del trabajo de un artista, el hacer a partir de una pregunta. Solo voy a quedarme con la primera oración de la idea Morrisoniana: " (...) la entrevista es la nueva forma del arte". Hasta que punto tiene sentido hablar de formas en el arte realmente no lo sé, pero es innegable que existen las archiconocidas, ejemplo cuadro, canción, disco, film, representación teatral, poesía, narrativa, etcétera, y es a este grupo de arte al que se refiere, como diría mi novia, el señor Mojo. 

 Daland Gutierrez es el cantante de la banda La armada cósmica, banda que si nos dejamos guiar por lo que dicen sus integrantes (cosa que jamas hay que hacer) busca lograr un sonido que ellos fueron a buscar a los suburbios de Londres, algo que realmente no se nota, ya que se sienten los latidos barriales a los que la banda le escapa, pero de los que le cuesta zafar, sumados a la voz de Daland que, sin ofender, arruina cualquier esfuerzo de sus compañeros por tratar de hacer algo copado (el tipo toca bien la guitarra, tendría que dedicarse a eso, se nota Page y Slash, este ultimo una influencia que empieza a notarse en guitarristas de veintipocos años). El pibe es, en apariencia, un aspirante a rockstar más en el cosmos, un hijo "de" con recursos para comprar instrumentos caros y grabar, pero fuera de la apariencia, es un tipo con el cual se puede pasar un momento muy ameno charlando en un café, o después de un recital. El "fuera de apariencia" de Daland, se lo conoce en una entrevista que le realizo Obi Defino para el programa El visionario (altamente recomendable para los amantes de las entrevistas). Esta seria una entrevista del primer grupo: la música de La armada que Daland "promociona" durante la charla, queda relegada a un segundo plano al ser eclipsada por su propia figura (la de Daland). Ya nos olvidamos de su vida como "músico", lo escuchamos como a un amigo.

 Un ciclo de entrevistas a escritores que puede verse en youtube llamado Audiovideoteca, nos ofrece una visita a la casa del Fabian Casas. Más allá de que en dicho ciclo, el escritor o escritora tiene que hablar de su vida como "escritor" (disculpad el abuso de comillas), en esta oportunidad Casas le escapa a la premisa y se desnuda frente a nosotros hablándonos de su infancia, del amor que llego a tenerle a su padrino (al cual según él mismo quería más que a sus padres), de varios libros que le partieron la cabeza, bla bla bla. Todo esto se va dando de una manera totalmente mágica acompañado de Cantata de puentes amarillos, de Pescado rabioso. De nuevo, nos olvidamos del trabajo de Casas como escritor, de hecho yo lo conocí acá, nunca había leído algo de él, y nos localizamos en su figura, en su manera de hablar (incluso en un momento nos lee un poema que a mí me cambio el paradigma de lo que era la poesía (en mí)), en su forma de acariciar los libros, en fin, hacemos foco en cosas en las que no se suele hacer foco porque el tipo, demuestra en la entrevista, algo que lo trasciende.

 Por ultimo, un ejemplo del segundo grupo. Conocerán a un tal Olmedo, "periodista" de "rock" que viene de la escuela de Pergolini (esto ya lo explica todo), un pedante que se cree que sabe de rock (no hay nada para saber en el rock, sobre el rock, no confundamos saber con conocer), peor aun, que se cree que sabe de música, en fin, el tipo trabaja o trabajaba en radio Vorterix. Un día, invito al ya mencionado Daland. De entrada, Olmedo preguntaba desde una posición al estilo "yo cuarenton pendeviejo experimentado, te pregunto a vos, pibito, hijito de Juanse". Hablan un rato sobre música, aunque, sin embargo, en ningun momento se le pregunta a Daland por el disco que su banda acaba de editar (para eso fue invitado).

 En determinado momento, Olmedo, con más mala leche que Orion cuando lesiono a Paredes en el entrenamiento, le dice al pibe "Le mando un saludo a mi gran amigo Juanse, tu viejo ¿Por qué le dijiste a la producción que no ibas a aceptar preguntas que tengan que ver con tu papa?. Daland se sorprende pero demuestra suguridad, le habla a Olmedo acerca del respeto, acerca del sentido de la ubicación y el profesionalismo y, apartir de ahi, al vivo de Olmedo se lo vera tenso hasta el final de la entrevista, no pensó que el chico tenia el cerebro más aceitado que el (no se necesita mucho, igualmente). Una joyita para poner en la entrevistateca de todos nosotros.

 Si un retrato, chato, hiperrealista, es considerado como arte (pongamosle), podríamos tomar a la entrevista como una radiografía vital, netamente visceral (obviamente dependiendo de como se realice) que nos muestre al personaje en cuestión como realmente es, infinito (como diría William Blake), o como dijimos al principio del texto, la entrevista también vuelve indelebles escenas que nadie esperaba y nos dejan algo que no esperábamos encontrar, como por ejemplo: lo que sea.

Como nueva forma de arte, aunque en realidad lo es nada nueva, nos permite acercarnos a gente que tal vez no nos cae y, aparir de ahí, conocer obra, conocer obras y nuevas formas de arte que identificamos como tales.

Con una Cuninngton bien fría y unas Merengadas, vean en youtube varias de estas perlitas. Repiensen a Morrison, por quien surgió este post, un tipo que, guste o no como cante o guste o no "su" música, es un gran pensador de la cultura contemporánea, ademas de ser un rockstar, también tenia algo que lo trascendía.

Entrevistense, manga de chalados!