Ana no duerme, Ana es cine...

 Reflexivos lectores, ¿Nunca sintieron la imperiosa necesidad de escapar de su familia? ¿De romper la credencial que los une a tan poderoso y absorbente clan? ¿Nunca sospecharon, que su verdadero enemigo, aveces (siempre) es su propia familia? La respuesta la adivino yo, y es sí.
 Ana Katz basa gran parte de su cine en esto, pero lo hace de una manera magistral. Ana crea escenas en las que una madre se gana todo el odio momentáneo de sus hijos con un simple comentario, crea familiares que viven para victimarse, crea discusiones que todos nosotros presenciamos y/o protagonizamos desde que tenemos uso de razón, muestra ridiculeces y muchos momentos de complicidad y ternura entre hermanos. También en sus films se ve la clara intención de UNO de los integrantes de estas familias, en salirse del circulo que nos termina asfixiando a todos.
 Vi dos películas de Katz, El juego de las silla (2002) y Una novia errante (2007). En la primera se refleja todo lo que mencionamos en el primer párrafo del articulo. Un hombre que vive en el extranjero y regresa a Buenos Aires para visitar a su familia (madre y hermanos), convive con ellos un par de horas mientras que de manera paulatina (o tal vez directamente repentina) parece ir recordando los motivos por los cuales había decidido partir del nido. En el papel de madre infumable, descolla la actriz Raquel Bank, un talento tapado del cine nacional. Ana Kats, también demuestra su destreza actoral encarnado a una de las hermanas. La película es una joya, asquerosamente graciosa y realista. Una novia errante, la pudimos enganchar en cable (canal Inca Tv) con mi novia (es casi imposible encontrarla en la web. Fue, de hecho, un milagro fílmico dar con ella en la tele). En la peli, una pareja que se encontraba en un micro, yendo a la costa a pasar las vacaciones, se pelea. La chica se baja del micro y sigue el derrotero sola. Su novio nunca salio corriendo atrás de ella. Se hospeda donde tenían previsto y su novio, de nuevo, jamas aparece. Efectivamente, él, ha decidido dejarla, pero nunca se lo dice directamente. Ella mantiene conversaciones telefónicas con él y de esta forma nos enteramos de la ruptura "definitiva". Ella comienza a ponerse densa. Lo llama, lo insulta, le corta el teléfono, lo vuelve a llamar. Esto lo repite de manera sistemática con el correr de los días. De acá en adelante la cámara sigue el camino de la chica por Mar de las pampas, donde conoce a gente extraña que le abre las puertas del pueblo. La protagonista (de nuevo Anita Katz, quien realiza un trabajo excelente de dirección y actuación) también mantiene conversaciones telefónicas constantes con su familia (su padre y su hermana) en las cuales podemos entrever como le rompen las bolas y como pretenden estar al tanto de todo lo que hace. Sin más, pronto, su papa y su hermana se aparecerán en la costa para pasar las vacaciones con ella. Claro, sin habérselo avisado previamente, jeje.
 Como cantan los anacrónicos Pimpinella "Quiero brindar por la gente sencilla, por el amor, brindo por la familia"
 Vean el cine de Katz, no maten a su familia después de leer esto (si lo hacen, no me echen la culpa, aunque me sentiría poderoso, al haber escrito algo evidentemente poderoso) pero mantengan los ojos abiertos, aun en la oscuridad de sus cuartos.
 Antes de despedirme les dejo algo para que tengan presente: 
 El escritor Guillermo Saccomanno dijo en una entrevista : "la familia es una institución en apariencia generosa y en apariencia bondadosa y en otra dimensión, como diría el psiquiatra escoses Roland Laine, es una organización mafiosa, entonces, el que se va de una familia se va con un secreto por lo tanto debe ser liquidado allí donde se lo encuentre".
 Salud fraternal.